La aparición de los taxis en Colombia se remonta a la ciudad de Bogotá, este acontecimiento se dio debido a una terrible crisis económica que sobrevino en 1930. Cuatro años antes, es decir, en 1926, se dio una tremenda sequía en el río Magdalena que impidió la navegación, por lo cual, el puerto de Barranquilla comenzó a acumular mercancías. De estas se quedaron bloqueados los pedidos de seis meses que había hecho la firma Praco que en ese entonces era la representante de la Ford para Colombia y ofrecía el famoso Modelo T, conocido como `Tres patadas`. Cuando finalmente los llevaron a la capital, la situación económica era terrible y las 120 unidades no encontraron compradores.
Antonio María Pradilla, fundador de Praco decidió entonces crear una flota de taxis para buscar alguna rentabilidad de los inventarios. Los primeros 20 fueron puestos en servicio causando sensación en la ciudad que en cuatro meses absorbió los 120 Ford.
El servicio público de automóviles estuvo a cargo de los grandes autos americanos, que debían someterse a la criminal cirugía de la broca y la soldadura para acomodar los taxímetros mecánicos Halda y de otras marcas. O también para que les perforaran la palabra taxi en el tablero con el fin de que no se destinaran a otros usos.
En 1961 hubo una invasión de carros de servicio público, en ella llegaron marcas como Ford, Plymouth Belvedere, Rambler, Dodge Seneca, Chevrolet Biscayne y otros de marcas en boga en Estados Unidos y que en su momento eran toda una novedad pues el gobierno tenía totalmente cerradas las importaciones de autos particulares por lo cual se estrenaba carro montando en taxi.
Los Dodge Seneca, era la principal marca usada entre 1960 y 1970, pero fueron reemplazados por los Warsawa polacos que eran un viejo Peugeot 403, las camionetas Skoda de solo tres puertas, los micro buses Volkswagen y luego los Auto Unión españoles con motores de dos tiempos, antes de toda la familia Polsky y Zastava, Eran las principales marcas de taxi
Posteriormente al establecerse el ensamblaje nacional, el Dodge Dart, que era el taxi del momento comenzó a ceder posiciones hasta desaparecer por cuenta de la llegada de los Renault y muy especialmente del Chevette, el cual fue nominado el ‘carro del siglo’
El Chevette también se tuvo que hacer a un lado durante la tercera invasión, aunque más pequeña y poco exitosa de carros de la antigua Europa Oriental.
Al final, Colombia tomó la ruta lógica de los taxis pequeños, de tal forma que los taxis coreanos se hicieron al control de nuestras calles, con marcas como Hyundai City y Chevrolet Chronos, a estas dos Le sigue la marca Kia.